Calle angosta, calle angosta, / la de una vereda sola. / Yo te canto porque siempre, / estarás en mi memoria. Sos la calle más humilde, / de mi tierra mercedina, / en los álamos comienzas, / y en el molino terminas. Tradicionales boliches, / Don Manuel y Don Miranda. / Frente, cruzando las vías, / Don Calixto... ¡casi nada!

Así reza la alegre Cueca de Alfonso Zabala y dice que, los cantores de aquel entonces, en esos boliches, en rueda se juntaban y, en homenaje de criollos, siempre lo nuestro cantaban.

Fue un encuentro muy agradable, a tal punto que decidimos que el año próximo volveremos. Había gente de todo el país: Rafaela, San Francisco, Paraná, Córdoba, Rio Cuarto, Villa María, San Luis, La Pampa, Tandil, Resistencia, Mendoza… Sesenta vehículos en la partida. La calidez del grupo organizador fue algo admirable. Al finalizar nos obsequiaron un DVD con toda la filmación de la prueba, además de todos los tiempos y un CD con música sanluiseña. El rally fue fiscalizado por la gente del Club Argentino de Regularidad. Rio Cuarto. Todo salió redondo, las marcas, los tiempos. Hubo varias categorías, pero la prueba se dividió en 40 y 60 kph. Contaron con el total apoyo de su Municipio, lo cual facilitó mucho la tarea de los organizadores. Viernes 6: acreditación, exposición y cena. Sábado 7: Regularidad, almuerzo, Habilidad Conductiva y, finalmente, cena de premiación. Terminamos a las 4 de la madrugada completamente fusilados. Domingo 8: desayuno y huida, "cada mochuelo a su olivo"

Cuando comentaba que pertenecía a CAdeAA, todos decían: "Ese es un Club como la gente". Que orgullo, ¿verdad?