Nuestra Bugattina

Nuestra Bugattina

Un regalo verdaderamente principesco

Nuestra Bugattina

El coche que comenzó todo. Roland Bugatti en <br/> el primer Baby Bugatti junto al hermano mayor, <br/> Jean, en un Type 43. La foto apareció en <br/> muchos periódicos lo que generó una gran <br/>demanda para el Baby Bugatti.
El coche que comenzó todo. Roland Bugatti en
el primer Baby Bugatti junto al hermano mayor,
Jean, en un Type 43. La foto apareció en
muchos periódicos lo que generó una gran
demanda para el Baby Bugatti.
Roland Bugatti manejando la Bugattina
Roland Bugatti manejando la Bugattina
Otra vista de Roland Bugatti manejando la Bugattina
Otra vista de Roland Bugatti manejando la Bugattina
La realeza también fue fascinada por la  <br/> Bugattina. El príncipe de Marruecos goza <br/> conduciendo una Bugattina para deleite de la  <br/> comitiva. Ettore Bugatti lo está asistiendo.
La realeza también fue fascinada por la
Bugattina. El príncipe de Marruecos goza
conduciendo una Bugattina para deleite de la
comitiva. Ettore Bugatti lo está asistiendo.

BUGATTI Type 52, BABY BUGATTI, BUGATTINA... Todos esos nombres nos llevan al mismo auto.

En 1927 a "Le Patron", como se lo conocía a Ettore Bugatti, decidió construir una versión en escala ½ de su exitosa Type 35 con motor eléctrico accionado a batería, para el menor de sus hijos, Roland, a la sazón de 5 años de edad.

Fue expuesta con éxito en la Exposición de Milán de ese año y comenzó a fabricarlas en una pequeña serie con una mayor distancia entre ejes para dar cabida a niños de 8 o 9 años, llevado una suspicaz idea: "Si el padre podía acceder a una verdadera, ¿por qué el hijo no podría tener la suya?".

Esa pequeña serie alcanzó, según los registros actualizados del Bugatti Owners Club, una cifra mayor a las 250 unidades. Estas joyitas tuvieron mucha demanda en Francia para el uso de los niños de las clases pudientes en parques y paseos diversos, especialmente en Deauville. A nuestro país arribaron más de 50 durante la década del '30 que fueron usadas en los jardines de Palermo y en el Zoológico. De ahí que aún se conservan muchas de estas piezas de colección por estos pagos.

El "juguete" desarrollaba una velocidad de 15 a 18 kph, tenía cubiertas con cámara, frenos en las 4 ruedas y llantas de aluminio con 8 rayos. Las campanas de freno eran integrales con las llantas y las zapatas de freno eran de madera, accionadas por una leva en el plato de freno, cable y en lugar de pedal de freno, la palanca imitando la del freno de mano, actuaba sobre las cuatro ruedas. El motor era alimentado por una batería. Por la carencia de diferencial, el motor, ubicado sobre el eje trasero, movía una sola rueda por medio de un piñón y una corona. La caja de dirección era a tornillo sin fin.

El manejo era sumamente sencillo. Bastaba con colocar la llave inversora en la posición 1 (Adelante) y apretar progresivamente el acelerador. Para dar marcha atrás, se pasaba la llave a la posición 2(Atrás). Desarrollaba la misma velocidad tanto hacia delante como hacia atrás. .

En Argentina, al día de hoy, la firma Pur Sang, fiel a su política de replicar autos y aviones famosos, también fabrica la Bugattina, con las mismas especificaciones de origen.

CAdeAA, intercambió visitas. Nuestros Socios visitaron el establecimiento Pur Sang de Paraná y el Sr. Jorge Anadón visitó nuestra Sede de Lomas de Zamora. Don Jorge, en un espontáneo y emotivo acto de generosidad decidió regalarnos uno de estos chiches. Desde entonces nuestros pequeños Socios disfrutan del mismo privilegio que tuvo l'enfant Roland Bugatti, haciendo sus primeras armas a bordo de tan noble y perfecta maquinita.

Sirva entonces este artículo para expresar nuestro profundo agradecimiento al Sr. Jorge Anadón por tan fino y generoso regalo

Por: Héctor Cordeiro
Fotos: cortesía Bugatti Trust.