A raíz del éxito de aquella reunión de Aviones y Autos antiguos que organizamos hace unos años en el Club de Planeadores Albatros con mi amigo y piloto Daniel Guerra (quien lamentablemente alzó vuelo), mis amigos de EAA (Experimental Aircraft Association) me preguntaban: -¡Che, ¿Cuándo vas a traer los autos?! En tanto que mis amigos de CAdeAA me decían: - ¡Che, ¿Cuándo vamos a ver los aviones?!

Luego de amistosas charlas con Héctor Freyre, presidente de EAA y otras autoridades de la misma, como Ernesto Acerbo y Miguel Garaguso (uno de los fundadores), pudimos concretar la participación de nuestros autos en la 29a Convención 2010.

La principal premisa que yo mismo le planteé fue que los autos no debían interferir en lo más mínimo con el desarrollo de la actividad aérea, de modo que quedaríamos siempre supeditados a las decisiones de la EAA en cuanto a cantidad de autos, ubicación y actividades a desarrollar por los mismos.

Se cursaron invitaciones a otros Clubes y, a pesar de que había que llegar antes de las 9hs para no interferir con el movimiento de los aviones y que la meteorología nos jugó en contra, el sábado 20 de marzo se presentó un grupo de valientes en el aeródromo.

El barro nos favoreció en cierta forma porque como el lugar que teníamos asignado estaba intransitable, ubicamos los autos frente a la pista junto a los stands de la Asociación Amigos del Museo Nacional de Aeronáutica y del grupo Proyecto Avro Lincoln, quienes están trabajando mucho para restaurar al famoso bombardero que se encuentra en el MNA.

Comenzó entonces la actividad aérea con vuelos de demostración, acrobacia, llegada de nuevos aviones, charlas técnicas y, como plato sorpresa, la presentación de los dos últimos modelos de helicóptero creados por el genial Ingeniero honorario Augusto "Pirincho" Cicaré. Ambas máquinas fueron estacionadas casi frente a los autos, una fue piloteada por el conocido Gustavo "Gato" Brea y la otra por Cicaré.

Público y pilotos colmaron las instalaciones desde temprano, me encontré con muchos conocidos que fui presentando a nuestro grupo. Cuando vimos a dos pilotos brasileños fotografiando los autos y mirando con curiosidad la baquet de Vaccarezza, nos acercamos con Germán, eran dos de los integrantes de la Escuadrilla Acrobática Fumaça, de Brasil, que actuaría a las 17hs con sus aviones que estaban asentados en El Palomar. A pesar de que los invitamos a subir a la baquet y fotografiarse, ellos no nos invitaron a volar en sus Tucanos... Con autorización y muchísima precaución, llevamos algunos de los vehículos para fotografiarlos junto a su avión, estacionado frente al hangar.

Las acrobacias fueron llevadas a cabo por pilotos de la talla de Malatini, Rampezzotti, Passano y muchos otros, electrizando a la concurrencia; en especial cuando Rampezzotti pasó en vuelo invertido a baja altura con la cabina abierta y saludando con la mano.

También se presentó la Escuadrilla Argentina de Acrobacia Aérea encabezada por César Falistocco y gran elenco, con sus Rans S9 y S10 cumpliendo espectaculares performances. Luego, Falistocco con su audacia característica, levantó del suelo una bandera argentina con un gancho ubicado en la punta de ala. Y por si eso no bastase, engancharon las puntas de ala de dos aviones con una cadena y salieron a volar así.

Y a las 5 de la tarde, ante el anuncio del locutor, se hizo silencio y aparecieron desde el norte los siete Tucanos de la Escuadrilla Fumaça desarrollando su actividad delante (o sobre) los 15.000 espectadores que no podíamos creer lo que estábamos viendo. Era el fruto de miles de horas de entrenamiento, mostrado con asombrosa precisión tanto en vuelos solistas como de conjunto. ¡Y pensar que nosotros teníamos la Escuadrilla Cruz del Sur de un nivel similar!

Cuando comenzó a bajar el sol, el conjunto de autos antiguos comenzó a retirarse en fila a marcha muy lenta entre los aplausos y los pulgares hacia arriba de la gente. Ellos pudieron salir con relativa facilidad del aeródromo. Mi auto, en cambio había quedado encerrado por otros. Tardé más de una hora para salir del predio y cuarenta minutos de ahí a mi casa en Ramos Mejía. Había autos estacionados sobre las banquinas de la ruta 6 y mucha gente quedó afuera, lo que da una idea del éxito de la convocatoria.

El domingo 21 llegamos al aeródromo a las 9hs. al mismo tiempo que un frente de tormenta con su característica línea de turbulencia (celaje, dicen en el campo). Al mismo tiempo arribaron algunos aviones pero la suerte ya estaba echada y una hora más tarde, ante la persistente lluvia sugerí que los autos se fueran antes que empeorase la cosa, no sin antes agradecerles en nombre de las autoridades y en el mío propio por animarse a venir pese al pronóstico meteorológico adverso.

Ha sido una hermosa experiencia para nosotros y para la gente de la EAA que continuará, a no dudarlo, el año próximo con aún mejores resultados.

La actividad de la EAA es permanente y para mayor información se puede acceder a www.eaa.org.ar y a info@eaa.org.ar

Valientes asistentes

Sábado
Por CAdeAA: Héctor y Cristina Doval con Ford Coupé 1937; Roberto Di Gaeta con M. Benz 220 Coupé; Germán Vaccarezza con Baquet Nash "Lola"
También amigos del Pilar Vehículos Antiguos; Patricio Seidel de la EAA con Torino 380 y Julio y María José PACINE con Jaguar XK 140.

Domingo
Por CAdeAA: Pedro y René Rubinetti con Dodge Dart conv.1960
También los amigos del Club Amigos del Ford A: Oscar Beber, R. Solange, R.Biancotti, Daniel Gómez e hijo, Pablo Peña y Daniel Catena.

¡Si señor! Como los buenos vinos, el Festival Aéreo de Morón mejora con el pase del tiempo y cada año se presenta mejor. En esta edición podemos decir que casi tiraron los hangares por la ventana.

Una meteorología excelente, como contratada, se sumó al creciente número de participantes. Industria automotriz, aeronáutica desde ya, aviones particulares y militares venidos de distintos lugares de nuestro país y de países limítrofes, pilotos acrobáticos, aeroclubes, aeromodelistas, automodelistas, Veteranos de Malvinas y todo ese gran espectro del quehacer y sentir aeronáutico y automovilístico se dieron cita en esta gran fiesta.

No faltaron los autos antiguos, que en estos dos días, con CAdeAA a la cabeza, sumaron más de 150 unidades.

Acertada idea fue la de exponer afuera gran cantidad de aviones del Museo, dejando mas espacio dentro de los hangares para el numerosísimo público que ocupó todos los espacios disponibles y algo más, bajo la atenta mirada del Sr. Director Comodoro Néstor Padilla y de un sinnúmero de colaboradores civiles y militares. Se calcula que esta vez el público superó la asombrosa cifra de 1.700.000 personas. UN MILLON SETECIENTAS MIL PERSONAS, cifra difícil de asumir, pensar y deglutir, aunque la vista desde la vieja torre de control semejara una marea de cabezas.

Como a la gente le interesa ver acción, tuvieron acción ¡Y vaya si la tuvieron! Llegada de aviones, acrobacia, paracaidismo, simulacro de rescate de un piloto derribado con helicópteros, aviones, combate con fuerzas enemigas y final feliz fueron parte de las emociones. Una mención especial merece la Escuadrilla Fumaça de Brasil, que una vez más nos honró con su electrizante exhibición. ¡Cómo no contener el aliento cuando nuestros Douglas A4 y Mirage atronaron el cielo de Morón, haciendo humedecer los ojos de miles de asistentes!

Una vez más, debemos agradecer a nuestra Fuerza Aérea, al Museo Nacional de Aeronáutica y a todos los que colaboraron para llevar a cabo con todo éxito la tamaña y difícil empresa de organizar un mega evento de estas características.

Si el Supremo así lo desea, nos volveremos a encontrar dentro de un año en ese mismo lugar y con cada vez mas entusiasmo.

Lo que vimos el fin de semana de AIR FEST fue de una envergadura y calidad inéditas en nuestro país. Creemos que una obligación civil dar a conocer la tarea del Museo y sus hombres. Para ello, decidimos entrevistar a su Director.

1. ¿Nombre, rango, cargo y responsabilidad en el Museo?
Comodoro Lic. Néstor G. Padilla, Director del Museo Nacional de Aeronáutica.

2. ¿Desde cuándo?
Desde el 5 de Marzo de 2009

3. ¿Cómo estaba el Museo al iniciar su gestión?
El Museo no tenía vida. Era, únicamente, una muestra estática de aviones.

4. ¿Qué tareas decidió encarar y por qué?
Además de las tareas de rutina nos propusimos, a través de la autogestión, darle vida con muestras semipermanentes. También, continuar recuperando aviones para poder ponerlos en condición de rodaje.

5. ¿En qué estado se encuentra hoy el Museo?
Hoy el Museo se está re creando y encontrando un camino de historia y cultura, que nunca había sido recorrido por sus integrantes, para impactar a la Sociedad toda.

6. ¿Qué logros subrayarías durante los años que lleva su gestión?
Los logros son materiales, recuperando aviones y elementos, poniendo en funcionamiento sus motores, restaurando lo restaurable y, sobre todo, un golpe de timón para sus integrantes, que están encontrando un camino que se reinventa a diario con iniciativas permanentes. Muchas de esas iniciativas son hoy palpables. El MNA tiene hoy su propio blog (museonancionaldeaeronauticamoron.blogspot.com), su propio Facebook, integra el sistema Ibero-Americano de Museos Aeronáuticos, Desarrolla seminarios de actualización y visitas a otros Museos para ser mejores en acción, no en declamación.

7. ¿Cuáles son los objetivos y acciones futuras?
El desafío es permanente y complejo, pero no claudicamos ante el desaliento general. Aspiramos a ser el mejor Museo del Cono Sur. Este año se cumplieron 50 años de la firma del Decreto de Estudio e Implementación de lo que es hoy el MNA, en constante afianzamiento del legado de los pioneros de nuestra aviación. Estamos cumpliendo un el sueño de sacar el Museo de los hangares, llevándolo a escuelas, Centro de jubilados, ONGs, acercando la historia a la gente.

8. ¿Cuál fue el resultado del Air Fest 2010 en cantidad de gente, difusión, interacción, etc.?
El sábado asistieron 600.000 almas y el domingo 1.080.000. Una cifra record, extraordinaria. El método de conteo se debió hacer con el sistema de foto aérea por cuadrícula. Un helicóptero toma fotos que se analiza la densidad humana en cada cuadro. La difusión en todos los medios gráficos y televisivos fue excepcional. La gente pudo acercarse a las máquinas, en muchos casos subir, ver su cabina, sentir al avión como algo vivo, útil, cargado de historia. Pocos conocían acrobacia aérea, globos aerostáticos, paracaidismo, ni habían experimentado la sensación de escuchar un avión de combate atronando el aire.

Dimos las gracias al Comodoro Padilla y nos fuimos asombrados por sus respuestas y secretamente orgullosos, pues este visionario, dinámico y mega emprendedor Director del MNA, es también el Secretario de nuestro Club.