Otra feliz idea para amenizar las tradicionales cenas de los viernes. Los Socios trajeron sus antigüedades, las que, generalmente, están asociadas con momentos o circunstancias particulares de su vida. Los relatos, al tiempo que se mostraban los objetos, conformaban pequeñas experiencias audiovisuales disfrutadas por la concurrencia. Todos somos, de algún modo anticuarios, desde que nos gustan los autos antiguos, ¿verdad?

Un viernes de Abril, la convocatoria fue lanzada para la exhibición de los increíbles pequeños autos, autos a escala, minimodelos o miniaturas, como se quiera llamarlos. Una afluencia que sorprendió por cantidad y variedad amenizó la velada, donde los Socio explicaron detalles de los modelos presentados. Una linda reunión que dejó ganas de repetirla.